"¿Cuánto tiempo te ahorrarías
si dejaras de fijarte en lo que dice, hace o piensa tu vecino
y te fijaras en lo que haces, dices y piensas tu?"
A veces podemos caer en la trampa de envidiar la vida de otros, pero lo cierto es que sólo vemos una cara, y puede que la que no se muestra no sea tan amable.
No compares tu vida con la de otros. Céntrate en tu vida, en tu camino, en lo que tienes y en lo bueno que puedes hacer con ello... sácale el máximo partido, y si no te gusta trabaja para mejorarlo todo lo que puedas.
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